27 de octubre de 2007

letras y sangre

Quizás si fuese vampiro, y durante la presencia del plenilunio de octubre, y me encontrara en una enorme biblioteca, alejado de la humanidad, quizás, esto le escribiría:

Quédate lejos, sí lo más lejano que puedas, en esa distancia que se encuentra mucho Más cercana al olvido púrpura, caminar y caminar sería la respuesta más práctica a los conflictos, alejarse del fuego para no quemarte y quizás alguna vez, hacerle caso a los ancianos padres que sobreprotegían a sus antiguas criaturas. Pero quédate en esa distancia lejana, cercana al olvido, cercana al no odio, al no desprecio, no vale la pena infectar tu corazón, tu mirada, tu torrente sanguíneo, no vale la pena, sufrir lo inevitable. No vale la pena llenar de desprecio y menosprecio a tu libre espíritu, de la enfermedad de la gente, esa enfermedad, que escuché en un concierto de voces, que parece llamarse HUMANIDAD, o al menos algunos desconocidos así la nombraban. Si lo sé, mientras lees esto dirás, pero tu eres humano, tienes carne, ojos, oídos, sentidos abiertos y emociones agitadas, a veces confundidas, eres humano tú, eres humano escribidor. Pero prefiero la distancia cercana al olvido, prefiero alejarme de lo que piensas mientras me lees, por que la humanidad se enferma, y una vorágine espiral la rodea, la cubre la engaña, pobre HUMANIDAD, y pobre de mí que formo parte de tu entraña. Prefiero la distancia, a escuchar a otros muchos guerreros de la tinta, expresar sus conflictos, Prefiero la distancia amarga, al dulce y rápido sabor de la compañía humana, Prefiero eso, el autismo, el silencio que se crea entre un pensamiento muerto y otro vivo -pensamientos propios claro-, a escuchar voces mecánicas e incoherentes que a penas tienen conciencia de lo que expresan a sus amistades de cartón, con su cabecita de metal –que realmente son contenedores de una aterradora oquedad de ideas-, prefiero beber mi café en compañía de mi sombra y sus sollozos, que a veces me suena a jazz libre. Prefiero alejarme a la distancia, y tomarme algunos momentos para escribir, solo para tener un poco de calor, y no morir con el frío del mundo. Prefiero caminar a escuchar las voces Prefiero caminar a ver a la humanidad morir en el vacío Prefiero camina, a escuchar la voz del músico que dice que no lo entienden Prefiero caminar a escuchar la letra, de algún novel escritor que cree saberlo todo en el mundo – y apenas entiende lo que pasa en su mundo-. Prefiero morir caminando Prefiero escuchar la voz de mis demonios, tienen mejor dicción que yo Prefiero caminar en la distancia, creo que así podría ayudarte más cuando de tus fantasmas hablas.